Música persistente, como tierrita en las uñas... así los Discos de la Semana
Esta colección de discos es igual de persistente que la tierrita que se queda entre la piel y las uñas. No importa cuántas veces te laves las manos, ahí se queda esa mugre que si no te dedicas a limpiar con cuidado y con atención, no se va a ir nunca.
Difícilmente vas a poder esquivar el disco nuevo de Squid, el de oklou o el de Biig Piig. Eventualmente vas a tener que prestarles atención para sacarlos de tu camino y de tu lista pendiente de música por escuchar, porque créeme, no es solo porque aparecen enlistados aquí, vas a tener que escucharlos si quieres entender el panorama musical de hoy en este mundo de mierda.
Los otros tres son para conocedores, si no te consideras uno, quédate con tu tierrita en las uñas, o atiende ese problemita de una vez y conviértete en uno, porque nuestras recomendaciones son una cortesía para que tú no tengas que hacer el trabajo de seleccionar qué de toda la música nueva vale la pena. Ya hicimos el trabajo por ti. No nos tienes que dar crédito. Solo dale play y saca tu propia tierrita de conclusiones. Nosotros ya decidimos, y tenemos las manos bien limpias.
Cowards - Squid
Madhavi
El primer golpe de Cowards, es su portada: un pequeño insecto curvo entre unos dedos de uñas largas que lo prensan. Algo en esa imagen te pone la piel de gallina, tal vez es el exoesqueleto peludo del pedazo de insecto.
Tal vez son las uñas, que son del mismo material. Tal vez son las dos. En cuanto empieza a sonar, te sumerges en una variedad de sonidos inesperados, que pueden sentirse tan líquidos como el agua o tan intensos como una llama ardiente. A lo largo del álbum, las emociones van fluctuando entre la melancolía, la diversión y el enojo, hasta llevarte a reflexionar sobre la existencia misma.
No es un disco fácil de comparar con otros, y tampoco es fácil de escuchar, lo cual lo hace aún más fascinante. Tampoco es sencillo encasillarlo en un solo género. Se mueve entre el post-punk y el post-rock, evocando bandas que van desde The Damned hasta The Jesus Lizard. Toma elementos de la música de los años 80 y los fusiona con su propio estilo, reafirmando a Squid como una de las bandas más innovadoras del Reino Unido hoy en día.
Cowards trae canciones rockeras, divertidas y otras un poco electrónicas. No suena “lindo y pulido”, se construye sobre sonidos ásperos y contrastantes con letras crudas que hablan sobre la existencia, la maldad y la tristeza. La música no acompaña estos temas con oscuridad, solo les agrega cierta chispa divertida, disfrazando un poquito su parte más sombría.
Es un álbum curioso, en el mejor de los sentidos, que te hará transitar en una carretera de muchas sensaciones. Con unas canciones te acelerará y con otras te dará una pausa tranquila, de pronto te hará querer bailar y luego te llenará de melancolía.
U R HERE - HONESTY
Vampi
Hay momentos en la vida de completa desolación. De una sensación tan intensa, asfixiante y aplastante. No es ese tipo de angustia que te obliga a hacerte bolita y esperar, es el tipo del que te hace querer gritar, correr y romper. Te da un empujón hacia la euforia de la devastación.
Así se siente el álbum debut de HONESTY, colectivo de Leeds, con una afinidad por las colaboraciones, con un sonido reflejante y alimentado por el trabajo de Massive Attack, Thom Yorke y Burial.
U R HERE es un grito ahogado lleno de claroscuros, diseñado para ser escuchado de inicio a fin. A lo largo de la escucha, muestra su influencia del legado británico oscuro, pero también su propuesta para esta tradición. Presenta canciones repletas de secuencias melancólicas ambientales, adornadas de ritmos trip-hoperos con mucha esencia de Mo’Wax, coros etéreos y letras que no sólo intentan justificar la existencia, si no en algún punto, hasta la defienden.
Las voces masculinas, los sintetizadores modulares y osciladores oscuros intentan arrastrarnos a un estado autoflagelante, pero los pads y la sección rítmica no lo permiten del todo. Las cajas de ritmo constantes juguetean con la batería análoga, y los golpes metálicos nos mantienen expectantes y atentos.
El resplandor máximo lo logran gracias a las intervenciones de destellos en forma de arpa, piano, voces femeninas muy referenciales a la presencia de Elizabeth Fraser en Massive Attack, y aquellos sonidos de la vida cotidiana, como campanas de viento, pájaros o voces de fondo, que se esfuman si no les prestas la suficiente atención.
Es un disco hecho para confrontar al mundo y su dolor. Entregarse a él, pero recordar siempre que todavía puede colarse la luz en una carcasa vacía. La vida sigue y ni modo.
choke enough - Oklou
Brenda
Los anuncios de Spotify que interrumpieron mi escucha de este disco me hicieron recordar que seguía en este plano terrenal y no en la dimensión de melancolía a la que Oklou me mandó a habitar. con su voz tierna y simultáneamente hipnótica, acompañada de una instrumentalización a la ‘electrónica europea’, se nota perfecto su formación musical en el piano y el cello.
choke enough es el álbum debut de esta artista francesa que reside en el Reino Unido (escuchen Selector Radio) y ha sido cobijada por la producción de Casey MQ (Shygirl, Empress Of, Flume, Oliver Sim) con quien colabora desde hace algunos años. cuenta con otras apariciones de proyectos como A.G. Cook, Underscores, Bladee. me gusta citar la disquera siempre, porque creo que dice mucho del sonido que podemos esperar del artistx, y este disco sale bajo el sello de true panther sounds que alberga a artistas como Celeste, Grace Lives o incluso nombres más grandes como King Krule.
Dicho esto, lo que Oklou presenta es un disco para *realmente* hacer introspección acerca de la complejidad que como personas navegamos diariamente en una existencia ya de por sí caótica. ¿cómo nos conectamos en un mundo hiperconectado, donde las palabras a veces no son suficientes? ¿en qué situaciones estamos dispuestxs a ponernos con tal de sentirnos vivxs? ¿cómo acceder a nuestro mundo interior que espera ahí suspendido esperando a ser desmenuzado, así como quesito oaxaca?
Pues descúbrelo (o no) a lo largo de estas canciones que pueden ser la banda sonora de tu transbordo en metro o de tu nueva crisis existencial :)
11:11 - Biig Piig
Bibi Lara
A las 11:11 pides un deseo. A las 4:00 am., todo está en silencio. Piensas en esa relación que ya no da para más, pero que sigue rondando en tu mente, y te das cuenta de que ese deseo ya no se cumplió. 11:11 captura justo ese instante cuando la emoción se ha ido, o te das cuenta de que tal vez nunca fue real. You could’ve hit me with the bad news first es la primera línea del álbum, y con ella todo se desmorona. De repente, sabes que nada volverá a ser igual.
Este disco tiene esa sensación de estar atrapado entre lo que fue y lo que nunca fue, entre el amor y el desastre, entre la euforia y la tristeza. Cada canción es como una capa más de esa relación en la que te preguntas si deberías dejar ir o aferrarte a algo que ya está muerto. Biig Piig captura a la perfección esa incertidumbre a través de ritmos que invitan a bailar y versos que pesan. Es la sensación de que la emoción fue real… o tal vez no, y lo que está claro es que ya se acabó.
11:11 te envuelve como una noche larga en la que intentas escapar, pero en lugar de eso te enfrentas a todo lo que no querías ver. No solo te abraza, también te deja con un vacío cuando termina, como ese deseo que nunca se cumplió. Como si todo pudiera haber sido diferente… pero no lo fue.
Glutton For Punishment - Heartworms
Leonardo Espindola
Si el Ultra de Depeche Mode estuviera en una fiesta y se topara con este álbum probablemente intentaría ligar diciéndole que es muy maduro para su edad.
El debut de Heartworms tiene una identidad que suena casi tan dramática como el rock gótico ochentero y similar a la oscuridad de la electrónica industrial noventera. Esa personalidad tan bien definida se la debe a dos personas: a ella misma por independizarse en la adolescencia después de una infancia traumática y a su productor Dan Carey, quien ha sido nominado al Mercury Prize por los discos debut de cuatro proyectos tan icónicos como distintos (Kae Tempest, Black Midi, Fontaines D.C. y Nick Mulvey). Jojo Orme creció tocando en la calle para sobrevivir, aprendiendo a producir sus propias canciones y obsesionándose con un modelo muy específico de aviones usados en la Segunda Guerra Mundial.
Su relación con Carey empezó con el primer single de Heartworms y se ha fortalecido con un EP y ahora un álbum completo. No sé si Glutton for Punishment sea tan celebrado como Everybody Down, Schlagenheim o Dogrel pero sí creo que la dupla de Heartworms y Dan Carey entregó uno de los debuts más completos y mejor definidos del 2025.