Los signos de los tiempos lo predecían, los pensamientos ignorantes, prejuiciosos, iban a triunfar. En un mundo en donde los confines digitales no existen, en donde podemos comunicarnos con todos en millonésimas de segundo, se cierran las puertas. Un lugar en donde buscamos el respeto y la inclusión. En ese planeta en donde las fronteras son imaginarias, se construyen de nuevo: el triunfo de los idiotas sobre la razón se alza. En la cinta Idiocracy (2006), del director y escritor Mike Judge –el mismo de Beavis y Butthead–, una sociedad del futuro es gobernada por imbéciles, pero cuando llega del pasado Joe Bauers (Luke Wilson) un militar que es obligado a participar en un experimento en una máquina del tiempo.
En esa sociedad, el coeficiente intelectual lo dicta la popularidad de los programas de televisión, las marcas y la pornografía, Bauers es considerado como el hombre más inteligente del mundo. Este personaje superdotado de inteligencia se le encarga resolver los problemas del mundo por el presidente de los Estados Unidos, autodenominado Presidente Camacho (Terry Crews), un personaje violento, armado hasta los dientes y que usa la demagogia para convencer a sus idiotas súbditos. Utilizando el sentido común –el menos desarrollado en Idiocracy–, logra salvar a la humanidad de la debacle política y ambiental. Nuestro futuro no es tanto como en Terminator, más bien es como Idiocracy, cuando un candidato a la presidencia del país más poderoso del mundo, que es abiertamente racista, misógino y bravucón, se impone a la cordura, tolerancia e inclusión. Un verdadero mundo gobernado por idiotas.
La eterna serie de Los Simpsons –que parecen premonitorios de todos los problemas del mundo–, vaticinaron el gobierno del actual presidente electo de los Estados Unidos. El episodio estrenado hace 16 años fue idea del escritor Dan Greaney, quien lo hizo como una “advertencia” sobre lo bajo que podría caer la política estadounidense. Tenía razón. El mismo George W. Bush, uno de los presidentes retratados como tonto por los medios, criticó a la serie porque representaban una imagen que no querían mostrar de lo era una familia norteamericana.
La cinta Arrrival, del director canadiense Denis Villeneuve, nos muestra una invasión extraterrestre sin un aparente motivo, en donde una lingüista es la encargada de poder descifrar los mensajes crípticos que los alienígenas nos traen. Una fábula en donde las fronteras no existen y en donde los inmigrantes de afuera son incomprendidos y rechazados por el inútil uso de la violencia. Sólo el lenguaje y la razón podrán salvarnos.
Las “legiones de idiotas" pululan Internet, como amargamente opinaba Umberto Eco, a quien seguramente la presidencia de Donald Trump no le hubiese sido sorprendente. Un mundo en el que cualquier mentecato puede ser presidente...
