La voz de Ana Moura, arraigada en el fado, se ha sumergido en el jazz, el soul y hasta el rock (entre sus admiradores están The Rolling Stones y Prince). Consciente de que la tradición significa movimiento, la cantante ha rejuvenecido de manera imaginativa a esa música portuguesa que evoca una melancólica espera, conquistado en el camino el Carnegie Hall en Nueva York y el Barbican Centre en Londres. Con su álbum Desfado, séptimo en su carrera, volverá a sonar en elLunario para hacer vivir en un mismo espacio al dramatismo y la belleza.
Con el uso inteligente de figuras retóricas en sus letras y ese toque sobrio pero elegante, así se muestra Ana Moura sobre un escenario y frente a las cámaras.
https://www.youtube.com/watch?v=B3c7etWevJY