Thelma y Louise una road movie dirigida por Ridley Scott, que llegó en 1991 con la promesa de revolucionar el papel de la mujer en el cine.
Sus dos protagonistas: Louise Shawer interpretada por Susan Sarandon, ganadora del Oscar que también ha protagonizado películas como The Hunger (1983) junto con David Bowie y Dead Man Walking (1996) y Thelma Dickinson encarnada por Geena Davis, también protagonista de The Fly (1986) y A League of Their Own (1992) en donde continua la lógica del empoderamiento femenino, comienzan un viaje para escapar de la monotonía y el hartazgo en sus vidas.
Es Callie Khouri guionista de este film ( ganadora de un Oscar al mejor guión), quien da paso a dos personajes que se atreven a jugar con los estereotipos de una sociedad patriarcal, desde el momento en que deciden emprender un viaje a través de largos caminos desérticos.
Louise y Thelma atraviesan Arkanzas, Oklahoma, Nuevo México, Arizona y finalmente al Gran Cañón, encontrándose con la soledad que ello implica, penetrando en un ambiente masculino ubicado en las carreteras y más aún en el bar de carretera en medio de la nada, en donde ocurre la violación de Thelma.
Ante lo cual Louise responde tomando un arma que antes había quitado a Thelma (quien le parecía poco precavida), disparando al hombre que ha agredido a su amiga.
Es en estos pequeños actos en donde se denota poco a poco el empoderamiento de los personajes femeninos, que comienzan a realizar acciones que nunca creyeron que harían. Como cuando Thelma (la clásica y sumisa ama de casa) se ve atraída por un joven seductor llamado JD (Brad Pitt), quien al final la engaña robando todo el dinero del viaje.
En este sentido constantemente las protagonistas son engañadas o golpeadas por practicas masculinas que les hacen transformarse en personajes fuertes.
De acuerdo con algunas teorías feministas la mujer constantemente a sido relacionada con la “otredad”. Su extrañeza proviene del poco conocimiento que se tiene acerca del alcance de sus actos.
Tal como ocurre en el acto final, en el que los personajes prefieren lanzarse al vacío en el Gran Cañón y morir siendo libres que encerradas ante el castigo de una construcción patriarcal.
Violencia y heroísmo
Un elemento constante a lo largo de las dos horas y nueve minutos que dura el filme, es el uso de la violencia que al ser ejercida se torna cíclica. Aquella violencia que proviene de los hombres cuando maltratan, humillan o timan a Thelma y Louise es retomada y ejercida por las protagonistas.
Por ejemplo, la investigadora Kayley Ann Viteo señala como Thelma y Louise, ha sido un referente para todas esas películas posteriores que tratan el tema de la violación de personajes femeninos que decidirán vengarse por propia mano de sus agresores.
Según la autora esta dualidad violación-venganza, parte de un mismo marco de desarrollo en los filmes, específicamente en el género de horror. Una primera parte, en donde ocurre la violación y una segunda parte en donde la mujer ha evolucionado y comienza su venganza.
Como ejemplo aparecen: Last House on the Left (1972/ remake 2009) o I Spit on Your Grave (1972/ remake 2010), incluso Kill Bill (Tarantino, 2003). Todas ellas películas que a pesar de situar a la mujer como objeto de violencia, modifican en cierto grado a la figura femenina en el cine.
Estos nuevos personajes que junto con el cine han ido evolucionando, por ejemplo: en un inicio aparecieron las mujeres pasivas como la madre abnegada o las mujeres objetos de deseo que menciona Laura Mulvey, más tarde llegaron personajes más activos como la femme fatale y la mujer vamp que van a dar paso a la figura que Celia Romea define como:
“La mujer heroína que busca heroicidades del hombre, desde las patrióticas clásicas a las últimas heroínas del cine actual (…)”
Por ello a partir de los actos de Louise en los que asesina al sujeto que ultrajó a su amiga Thelma, esta apropiándose de una violencia masculina logrando su venganza o el cumplimiento de la justicia. Idea que se reafirma desde la postura de Patricia O’Connor quien señala que:
“La violencia que viene de ellas no se propone sustituir una violencia masculina por una femenina, no es para controlar, sino que nace de la desesperación”.
Sin embargo, al final de la trama los personajes se encuentran con una justicia que se ha construido en una sociedad patriarcal y que les obliga a decidir entre ser libres y morir o perder su libertad, como consecuencia de haberse convertido en heroínas.
La mujer y el cine
Recientemente el film Thelma y Louise ha cumplido 25 años de haber visto la luz, no obstante, en estas más de dos décadas desde la perspectiva de Davis no han surgido grandes modificaciones para la mujer en la industria cinematográfica.
Un pensamiento que comparte con Sarandon (en la cena de honor para las actrices de Thelma y Louise, realizada por el programa Women in Motion junto con Cannes Film Festival), quien ha mencionado que el cine continua conquistado por figuras masculinas, tanto en personajes como en dirección o producción.
Finalmente, el incremento de directoras, productoras, cinefotógrafas, guionistas o personajes femeninos en el cine se ha encontrado con un escenario incierto en el que la mujer no se ha desarrollado tanto como se hubiera esperado después de la aparición de Thelma y Louise, las heroínas de los noventas.