Este martes 27 de diciembre, a la edad de 60 años ha fallecido Carrie Fisher, quien será recordada por interpretar a la Princesa Leia Organa en la saga original de Star Wars. Su muerte fue consecuencia del paro cardíaco que sufrió el pasado 23 de diciembre a bordo de un vuelo de Londres a Los Ángeles, donde fue hospitalizada en estado crítico en el Centro Médico de la Universidad de California.
En 1956, año en que nació la princesa del planeta Alderaan, fue un año especial para la industria del entretenimiento en el planeta tierra: Elvis Presley editó su primer álbum y Aretha Franklin hacía lo propio a los 14 años de edad.
Carrie Frances Fisher no solamente fue actriz de cine y televisión, escribió una serie de libros donde plasmó sus sentimientos. Fue hija del icono de la música de los '50, Eddie Fisher y la también actriz Debbie Reynolds, recordada por su papel en la cinta Singin' in the Rain (1952) al lado de Gene Kelly.
Como actriz:
El inicio de la carrera de Fisher comenzó en 1973, cuando ingresó al Central School of Speech and Drama en Londres, donde estudió actuación. Dos años más tarde, hizo su debut en la cinta protagonizada por Warren Beatty llamada Shampoo.
A los 19 años encarnó el papel que la convirtió en un icono pop: la Princesa Leia Organa en la trilogía original de Star Wars, bajo la dirección de George Lucas, Star Wars: Episode IV: A New Hope (1977), Star Wars: Episode V: The Empire Strikes Back (1980) y Star Wars: Episode VI: Return of the Jedi (1983).
A este trabajo le siguieron apariciones en cintas como The Blues Brothers (1980), The Man with One Red Shoe (1985) de Woody Allen, Hannah and Her Sisters (1986) y posteriormente en la cinta protagonizada por Billy Crystal y Meg Ryan en When Harry Met Sally.
En 2005 fue reconocida con el premio Women of Vision Award por parte del Women in Film & Video – DC, nominada recientemente este año en los Saturn Awards por su papel en Star Wars Episode VII: The Force Awakens como mejor actriz de reparto.
Tuvo apariciones especiales en programas como The Big Bang Theory y recientemente tuvo un cameo digital en la cinta Rogue One: A Star Wars Story.
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Como escritora:
Fisher dedicó su vida a las letras, publicando hasta la fecha ocho libros, algunos en co-autoria sumando catorce en total, entre los que destacan: When Sophie Gets Angry , Really, Really Angry, Cartoline dall'inferno, Hollywood Moms, The Emperor's New Clothes, Surrender the Pink entre otros.
En 1987 se editó una novela autobiográfica llamada Postcards from the Edge donde narra su experiencia y lucha contra las adicciones, mismas de las cuales siempre habló abiertamente y se convirtió en una férrea activista en contra del uso de sustancias, ofreciendo conferencias y charlas a jóvenes. Este mismo libro sirvió como guión para la cinta de homónima de 1990, protagonizada por Meryl Streep y Shirley MacLaine.
Algunas memorias de aquellos días son recopiladas en su libro semi biográfico The Princess Diarist, donde también narra el romance fugaz que sostuvo con el actor Harrison Ford, durante el rodaje de Star Wars.
Su último libro publicado en 2008, fue una autobiografía titulada Wishful Drinking misma que se convirtió en un documental para la cadena de televisión HBO y un monólogo teatral.
Como Sex Symbol:
El personaje de Leia se ha convertido en un referente que ha marcado a varias generaciones, convirtiendo a una princesa en un símbolo sexual e icono de la moda, que se ha traducido en un negocio millonario por concepto de venta de merchandising con la imagen de Carrie.
Hoy la galaxia llora la muerte de Carrie Fisher, la figura de una mujer que transformó el estereotipo de una delicada princesa en una mujer fuerte, que más allá de ser la protagonista de una galaxia muy lejana, escribió en papel sus memorias y pensamientos.
See you soon Carrie, May the Force be with you...
