Ya pasaron 10 años del estreno de '300'
Sangre, violencia y testosterona. El estereotipo de los griegos como filósofos es destrozado con la hipérbole del soldado espartano estilizado en 300 (2007), del director Zack Snyder. Una película que no puede ser juzgada por su apego al realismo, sino por el mérito cinematográfico. El estilo caricaturesco de 300 puede encontrarse en otra película realizada dos años antes. Sin City (2005) de Robert Rodríguez, lleva el look del cine noir al extremo. Ambas comparten el mismo punto de referencia: las novelas gráficas de Frank Miller. El escritor y artista conocido por otorgarle un tono sombrío y serio a Batman en el cómic Year One (1987), es también autor de 300, obra de la que parte la cinta de Snyder.
Snyder era un director relativamente desconocido, hasta ese entonces solo había realizado una película, el remake de Dawn Of The Dead (2004). Fue a partir de su segunda realización, 300, que el director adquirió reconocimiento por crear un estilo visual que permanece en blockbusters como Man of Steel (2013) y el nuevo universo cinematográfico de DC Comics.
La historia se basa en los sucesos históricos de la batalla de Termópilas en el año 480 a. C. El reino de Esparta es amenazado por el imperio persa, liderado por Xerxes (Rodrigo Santoro). Los espartanos y su rey Leónidas (Gerard Butler), defienden su tierra con un ejército de sólo 300 soldados contra millares de enemigos.
El apego de la cinta a su fuente de referencia es sumamente fiel, tanto que se puede considerar al cómic como el storyboard de la película. Snyder replica las ilustraciones de la obra de Miller con gran atención a los detalles y el producto final es una representación dramática, exagerada y artística de la batalla de Termópilas.
Si bien 300 cuenta con un gran elenco, Lena Headey, Gerard Butler, Michael Fassbender, y David Wenham entre otros actores de renombre; los personajes pueden resultar unidimensionales y prácticamente no son desarrollados a lo largo de la historia. La testosterona también juega un papel importante, ya que Headey (quien interpreta a la reina Gorgo) es la única actriz protagónica en un mar de músculos, six packs y vello facial.
Lo que es más remarcable de 300 es su estilo cinematográfico. Snyder recurre a los fashion films y cintas de arte para crear el look de la película. Con visuales que se asemejan a los comerciales de perfumes de Chris Cunningham; combinados con técnicas como los speed ramps utilizados en The Matrix (1999), que juegan con diferentes velocidades de cámara; al igual que close ups dramáticos; 300 está repleto de imágenes icónicas y memorables.
El estilo que Zack Snyder implementó en 300 tiene tanto impacto, que lo reafirmó en su siguiente película Watchmen (2009). Más tarde el director comenzó una relación con el universo cinematográfico de DC Comics y dichas producciones como Man of Steel (2013) o Batman vs Superman (2016) heredan el carácter gráfico de la cinta situada en Esparta. A diez años de su estreno, 300 se mantiene vigente por crear un estilo cinematográfico que se puede ver en películas que se estrenan hoy en día.