Por Miguel López Valdivia (@miguellvaldivia)
Sí, hoy Juliette Binoche presentó la nueva película de Oliver Assayas: “Nubes de Maria”. Sí, es de esas mujeres que son tan guapas en persona como a ustedes les gustaría pensar. Y sí, la película me encantó; pero como todos van a hablar de ella, me gustaría más bien tocar el otro lado que tiene el Festival Internacional de Cine de Morelia. Algo que me enamoró desde la primera vez que vine y que son las retrospectivas: cintas antiquísimas con una curaduría más que gozadora que no sólo serían difíciles de encontrar, sino también, casi imposible de volver a tener la oportunidad de ver como se tienen que hacer; en la pantalla grande.
Este año, la filmoteca española presenta cuatro películas, entre las que se encuentra “Los Peces Rojos”, una especie de film-noir de mediados de los cincuenta dirigido por José Antonio Nieves Conde y estelarizado por Arturo de Córdoba y Emma Panella interpretando a Hugo e Ivón. Una cinta que nos lleva a la vida de una pareja de recién comprometidos, quienes en un viaje de fin de semana se enfrentan con el trágico accidente de la muerte de Carlos, el hijo de Hugo, con lo que las autoridades del pueblo se ven envueltas para resolver un caso de lo que parece ser un asesinato.
Esta película es grande por una razón: está adelantada a su tiempo. Las vueltas de tuerca sí logran impactar, el tono y los movimientos de cámara, así como la elección de planos y la manera en la que usan el arte, denotan mucho más madurez que la mayoría de los cineastas ya establecidos en esta generación.
A diferencia de otras películas de época, no se siente falsa ni cae en un tono tan melodramático que da risa accidental. Los personajes, más que nada el de Hugo, van evolucionando y se van complejizando en distintos niveles, lo que te logra envolver más y más dentro del mundo que se nos presenta.
La película podría tener varios finales; es de esos ejercicios que sientes que ya se van a acabar pero sigue y sigue. Cuando sucede esto, muchas veces terminan por defraudar, pero lo que hace “Los Peces Rojos” es llevar la tensión hasta su punto de quiebre.
No entiendo por qué esta no es un nombre propio dentro de los clásicos de la cinematografía, pero lo que sí, es que es una cinta obligatoria para cualquiera que se declare amante del thriller en la pantalla de plata.