Jun 11

Jun 11 [RESEÑA] Zola Jesus Semana Indie Rocks!

Al igual que en cualquier festival, ser el acto final de la Semana IndieRocks! no es poca cosa; es un compromiso grande que debe dejar a los asistentes con un buen sabor de boca, más aún después de lo hecho por Antibalas y APTBS.

Tan delicada labor correspondió en esta tercera edición a la estadounidense de ascendencia rusa, Nina Roza Danilova, mejor conocida como Zola Jesus; que estaba de vuelta en México tras su presentación en Sala de Febrero 2015 para presentar su nueva producción Okovi.

Pero en esta ocasión los reflectores no serían de Nina, sino de la mexicana Renee Mooi. Por más indiferente que el público llegue a ser con los actos que abren un concierto, en especial si son nacionales, ese fue uno de los puntos álgidos de la SemanaIR. Todos los actos que inauguraron las actividades día con día entregaron todo de sí para ser incluidos en las Instagram Stories del concierto, o en una reseña como en este caso.

Renee subió al escenario sola e inició cantando a cappella, como si de Fiona Apple estuviéramos hablando; pero posteriormente una guitarra, una batería y un par de tornamesas se unieron y transformaron la delicada ninfa en una atronadora y ruidosa Banshee que ahora remitía más al trabajo de Trent Reznor. La casa de Zacatecas 39 se cimbraba ante lo estruendoso del set de la mexicana que con temas como "Libélula" y "Black" no hacía más que atraer a la gente que se encontraba afuera, como un imán a un montón de clips.

Finalizada su presentación era notoria la impresión de los asistentes así como un ligero tinnitus en sus oídos; había sido tan sorprendente que ella parecía el acto principal de la noche. Zola Jesus tenía unos zapatos grandes por llenar con su presentación.

Por fortuna Nina no es una iniciada en la música y echó mano de todo el misticismo que acompañan su figura, así como de su amplio rango vocal, para hechizar a una mayor audiencia. Canciones tanto de Okovi como de sus primeras producciones llenaron el setlist de la norteamericana.

Al final, como si de un cuento de los hermanos Grimm se tratara, el hechizo se rompió con la doceava campanada y con ello finalizó la tercera Semana IndieRocks!; una edición accidentada pero que no por ello fallida y que dejó a quienes pudieron asistir con muchas ganas de volver para una siguiente ocasión