Sopladora de hojas es la ópera prima del director mexicano Alejandro Iglesias, un largometraje que lleva tiempo exhibiéndose en los principales festivales cinematográficos de México.
El guión fue co-escrito con Luis Montalvo compañero del CCC de Iglesias, quien se hace cargo de la fotografía de la cinta.
Sopladora de hojas es protagonizada por Lucas (Fabrizio Santini), Emilio (Paco Rueda) y Rubén (Alejandro Guerrero), tres adolescentes en búsqueda de un juego de llaves perdidas en medio de un montón de hojas secas. Una tarea sencilla en apariencia pero entre más profunda sea la búsqueda, más complicado será ya que los llevara a enfrentar sus mayores miedos.
Es de destacar que durante la más reciente entrega de los premios Ariel contó con una nominación en la categoría de revelación masculina con los jóvenes actores Alejandro Guerrero y Fabrizio Santini.
Ibero 90.9: Estamos a unos meses del estreno oficial de tu cinta, aunque ya ha estado presente en varios de los festivales más importantes del país, ¿Cómo te sientes que tu ópera prima esté viendo la luz en la industria cinematográfica?
Alejandro: Estoy muy feliz y agradecido es un sueño que a tu primer película le vaya bien, ya que siempre estás con la expectativa, no sabes si lo podrá lograr o no, si tendrá eco con el público, con la prensa o cómo será recibida en los festivales. Obviamente lo ideal es que efectivamente conecte con todos pero a veces es difícil romper esa burbuja y lo que para algunos es bueno para otros no.
Afortunadamente esta es una película muy amable con todos ya que encuentran algo lindo en ella y eso es para mí es un sueño. La verdad es que no imagine los premios y la selección para participar en los festivales. Aunque la buena recepción del público es en realidad lo más importante.
Por ejemplo en las funciones de prensa me gusta ver cómo se ríen o en estas sesiones de preguntas y respuestas con el público que cuenten cómo es que les recuerda a su adolescencia o que los mismos jóvenes de hoy te digan que ellos son así.
La idea surgió una tarde con mis amigos en casa lo que la vuelve aún más increíble, sin duda estoy muy orgulloso y eso escapa a cualquier sueño que haya tenido.
Ibero 90.9 Sé que añoras tus años en la Universidad ¿Cómo te sientes hoy a la distancia en relación a aquella época donde pasaban días enteros viendo cintas en la Cineteca Nacional, y más cuando estas apunto de ver tu cinta en el mismo lugar a donde soñaste ser cineasta?
Alejandro: Es como sentir que ya la hice no importa lo que pase, ver tu película donde viste a esos directores que más admiras, vaya creo que ni siquiera me pasaba por la cabeza el que algún día podría yo estar ahí, solo iba disfrutaba de las películas y ya.
Ahora tengo una mezcla de nostalgia, por esos tiempos que no sabía lo que venía y una sensación como si quisiera verme al pasado y decirme a mí mismo: “Todo va a estar bien, tu película va a tener exhibición y vas a estar filmando películas” que al final era como ese sueño loco que yo tuve a los 14 años y decir: “¿Porqué no? ¡Quiero ser director de cine!”.
Independientemente de donde se exhiba y de las películas que vengan, para mí ya es haber logrado algo muy querido y deseado en mi vida. Si hay algo de melancolía de esos tiempos que ya no van a volver, en los que pensaba que debía entrar a ese mundo adulto y justo es eso lo que reflejo con esta película.
Mucha gente de entre 30 y 40 años me dice que mi cinta es profundamente nostálgica, ya que se ríen y recuerdan esos tiempos donde pasaban las tardes con sus amigos sin hacer nada, cuando los días parecían eternos y no tenías que tener un objetivo en específico, sino simplemente el estar.
Y bueno, eso fue lo que pasó, una tarde mientras buscaba mis llaves estando en mi casa con mis amigos, me di cuenta que lo que se estaba gestando era el futuro y hoy es esta película, eso es casi mágico.
Ibero 90.9 Es difícil saber qué depara el futuro más en un mundo que evoluciona tan rápidamente pero… ¿A dónde te gustaría estar a ti como director en 10 años?
Alejandro: Mira más que propiamente en un lugar, con algún premio o en algún festival, creo que a lo que aspiro con todas mis fuerzas es a seguir haciendo esto, espero poder verte en 10 años y decirte mira voy en mi 4ta o 5ta película y son las películas que he querido hacer que he buscado y que no me he sentido obligado a hacerlas.
Sé que algunas tendrán más o menos conexión con el público, por supuesto no podemos esperar que siempre sea así, pero el hecho de poder dedicarte a lo que te gusta, eso ya es un privilegio y es casi como un regalo.
Por lo mismo es que también es una responsabilidad si tienes ese regalo utilizarlo como es debido y hacer las películas que quieres hacer y por otro lado que sientas que le sirven a la agente o al país para algo, no necesariamente hablo de cine social sino que comunique algo que para ti sea importante.
Ibero 90.9 En nuestro país hay diversas instituciones y festivales que apoyan este tipo de proyectos, que crean una ventana para jóvenes cineastas como tú ¿Qué es lo que nos hace falta en México para que esos futuros cineastas puedan tener acceso a estos recursos y puedan hacer cine?
Alejandro: Pues primero que nada creo que ahora es mucho más fácil hacer cine en el mundo y en México, no por ello digo que es fácil pero ahora es más común que se den apoyos por parte del gobierno y se obtengan recursos de instituciones privadas, y estos fondos y fideicomisos como el de FIDECINE y EFICINE que han logrado que la producción nacional haya tenido un boom en los últimos años de apoyos a nuevos cineasta.
Sin embargo, creo que se ha hecho un embudo, donde ya hay una mayor producción, pero no una buena exhibición, es decir que una película mexicana debe de poder mantenerse en cartelera durante un tiempo considerable y competir contra esas cintas Blockbusters que vienen de Hollywood, ahí es donde viene el verdadero problema.
Es verdad que se hacen muchas cintas mexicanas pero no logran exhibirse el tiempo adecuado y aquellas que logran hacerlo son muy pocas.
Considero que es ahí donde tenemos que trabajar más y reconquistar nuestros espacios ya que con ello podremos conseguir que la gente vuelva a esperar con gusto una película mexicana sobre una extranjera y prefiera ver nuestro cine, directores y actores, sobre aquellos que vienen del otro lado del río o del muro (esperemos que eso no pase).
Y esa labor es de nosotros los cineastas, debemos de reconciliar al cine comercial con el cine de autor con el apoyo del Gobierno y de sus políticas que nos ayuden a proteger y garantizar un tiempo adecuado de exhibición de las cintas mexicanas.
No se trata de darles preferencia quiero aclarar, pero si el que se les de igualdad de circunstancias para competir. Sé que no tenemos la misma infraestructura y recursos que una película que viene de algún gran estudio, pero las circunstancias pueden ser las mismas si logramos tener la misma cantidad de publicidad y exhibición.
Por último considero importante descentralizar los recursos y las oportunidades, yo agradezco mucho a los festivales que nos han recibido, eso ayuda a que dejemos de lado la idea que el cine solo se hace en la Ciudad de México, yo soy de ahí y me encanta que se haga cine en otros lugares como en San Luis Potosí, Querétaro o Veracruz.
Y eso ya está pasando, estos festivales está ayudando a que el entusiasmo crezca en Morelia en Guadalajara por ejemplo. Y este tipo de eventos ayuda a todo eso, que no se quede únicamente en la proyección, sino que se creen talleres y charlas.
Que los estados creen políticas que brinden beneficios económicos y fiscales para trabajar en sus ciudades y de esta forma lograr que todo el país se involucre en la industria cinematográfica.
Sopladora de Hojas se presentó con gran éxito durante la pasada edición de la Fiesta Internacional de Cine en San Luis Potosí.
