Estamos a nivel Elisa Carrillo con la Compañía Nacional de Danza y la Orquesta del Teatro de Bellas Artes La Esmeralda Auditorio del Estado
Por Agustín Peña
La expectativa era grande ante quien se ha pronunciado como la “joya de valor incalculable”, y no era para menos si contamos con que esta estrella ballet mundial resulta ser una mexicana que ha despuntado como primera bailarina de la Ópera de Berlín. Elisa Carrillo, una mujer sensible y de una sencillez notable, ofreció una conferencia de prensa donde se le cuestionó su reciente spot promocional del gobierno mexicano, ante el cual ella admitió tomar lo que mejor le beneficiaba, no tanto porque llegara tarde el reconocimiento, sino porque está con el pueblo mexicano.
La función, tres actos que van de menos a más, mucho más. La historia es conocida, La Esmeralda que reparte su corazón generosamente pero que conserva un lugar especial para alguien a quien tiene prohibido. La historia, como la mayoría de estas fantásticas historias, contiene altos grados de apasionamiento, tragedia, engaños, y demás muestras de las pulsiones humanas, altas y bajas.
Sin grandilocuencias, la Compañía Nacional de Danza hace un gran trabajo en cada acto, desde los pintorescos gitanos hasta las damas de compañía de Fleur-de-Lys, presumimos Agustina Galizzi, quien además, hace un final del segundo acto que compite con la estelar Elisa Carrillo. Es en este segundo acto donde lo Compañía, y el público, comienzan a ver danza de altísimo nivel. Aquí recordamos las palabras de Elisa en conferencia de prensa en la que afirma que “las diferencias entre la Compañía Nacional de Danza y las de otros lados del mundo son casi inexistentes”, ya que el trabajo que ella ha realizado con una y otras le ha dejado ver que gozamos en nuestro cuerpo de baile con una gran calidad.
FOTOS: Claudia Reyes / FIC