La tarea de Christopher Lee como el Conde Drácula era ser inmortal.
El mundo ha perdido a uno de los grandes: Sir Christopher Lee falleció la mañana del domingo 7 de junio en el hospital Chelsea and Westminster en Londres a sus 93 años de edad, sin embargo su esposa compartió la triste noticia hoy por la mañana. Lee se encontraba desde hace tres semanas en hospitalización por problemas en vías respiratorias y perdió la batalla.
Los últimos quince años de su carrera fueron de los más fructíferos, ya que nadie nunca podrá olvidarlo como Count Dooku en Star Wars o como Saruman The White en la trilogía de Lord of the Rings. Pero no se debe olvidar que Christopher Lee tuvo más de sesenta años de trayectoria en la industria cinematográfica, recorriendo casi todos los géneros: fue Drácula, Scaramanga (uno de los villanos más emblemáticos que haya enfrentado a James Bond), Lucifer, Sherlock y Mycroft Holmes, entre otros.
Aparte de ser uno de los actores más emblemáticos de múltiples décadas, Lee también era un músico excepcional. No sólo contaba con una singular voz que casi lo convierte en cantante de ópera, también era fan del heavy-metal. Sacó un par de discos bajo este género: Charlemagne y A Heavy Metal Christmas Too (el mejor regalo para cualquier Navidark).
Lee fue uno de los actores que rompió el esquema de la edad. La vejez dejó de ser primordial y su experiencia permitió que llegara más sobriedad y pasión a sus personajes.
Dicen por ahí que la historia del cine se mide antes y después de Star Wars, por suerte Christopher Lee hizo el recorrido completo. Desde aquellos que vivieron en los cincuentas hasta los Millenials lamentan la pérdida de Christopher Lee y sin duda será recordado siempre. Descanse en paz.
“Making films has never just been a job to me, it is my life”. –Sir Christopher Lee
Por Tskuanda SP (@Tskuanda)