"Si soy una espía, soy la peor espía que te pudieras imaginar": Maria Butina
Maria Butina, de 30 años de edad, en una celda en solitario, tuvo que firmar el acuerdo de ser culpable de conspiración y tal decisión le otorgó la menor sentencia en 2019.
La cuestión es que no hubo evidencia suficiente para culpar de “espía” a la joven rusa, razón principal por la cual empezó a ser investigada por la Federal Bureau of Investigation (FBI).
Los rumores sobre ella (el sexo con políticos estadounidenses; su trabajo de espionaje; su relación amorosa falsa y sus estudios en EEUU como fachada) fueron buenos encabezados que los medios quisieron usar. Los periodistas creyeron ciegamente en las conclusiones que salieron del FBI, cuando en realidad éste tergiversó con frecuencia la información contenida en sus e-mails e interpetó a su favor todas las fotos que ella subía a las redes sociales con políticos norteamericanos.
Butina es una mujer nacida en Siberia y quien pertenece a la primera generación post comunismo. Estudió Relaciones Internacionales en su país y abrió una pequeña cadena de mueblerías. Cuando intentó seguir su negocio en Moscú, la competencia era muy alta y decidió volverse activista política pro armas de fuego.
La iniciativa política de Butina era apoyar a todos los rusos que quisieran ser dueños de armas legalmente (Putin siempre ha estado en contra de estas propuestas) para poder proteger a su familia, a su propiedad y a ellos mismos. Generalmente este nicho se conforma por hombres de mediana edad.
Así, Butina buscó apoyo en EEUU para que ambos países pudieran abrir un canal de comunicación pacífico donde ambos se apoyaran. Pronto se relacionó con políticos importantes como George O’Neill, nieto de John Rockefeller y heredero de su fortuna. Y fue él quien pagó su maestría en aquel país que inspiró las leyes rusas después del comunismo.
Butina fue sospechosa para ambos países, cada uno pensando que ella era espía del país contrario. Sin embargo, cuando la detuvieron, Rusia detuvo a un ex marino, Paul Nicholas Whelan, que viajaba seguido ahí y quien levantó sospechas. Se cree que era un plan para intercambiarlos. Actualmente el estadounidense podría ser condenado hasta 20 años de cárcel.
Las dudas sobre Butina acrecentaron cuando estalló la controversia sobre los hackers rusos involucrados en las elecciones del 2016 y el presunto dinero que Rusia había invertido en la campaña de Donald Trump.
"La investigación confirma que la NRA y sus funcionarios, miembros de la junta y donantes se comprometieron en un esfuerzo de muchos años para facilitar las actividades de Maria Butina y Alexander Torshin en Estados Unidos", dice el informe. ¿Ustedes qué opinan?