Fotos: Cortesía OCESA / Liliana Estrada

Tuvieron que pasar seis años para que la banda de rock alternativo regresará a México, luego de casi nueve años sin presentar material nuevo. Placebo regaló una magnífica noche de música a su propio estilo y el motivo de esta presentación fue su último lanzamiento de estudio, Never Let Me Go.

La noche inició con “Forever Chemicals”, canción que despuntó con riffs bastante fuertes, acompañados de gritos de emoción en un Palacio de los Deportes completamente lleno. La emoción continuó con “Beautiful James”, uno de los sencillos del reciente álbum. Siguieron las piezas “Scene of the Crime”, “Hugz” y una pausa con la que el grupo interactuó con el público:

“Gracias, bienvenidos a todas, mi nombre es Brian y el nombre de mi grupo de rock es Placebo, es una noche muy especial para nosotros y esperamos que sea lo mismo para ustedes. Esta canción es para mi hermano".

De repente comenzó a tomar fuerza el sonido del tema “Happy Birthday in the Sky”.

La noche continuó con “Bionic” que se puede escuchar en el álbum Placebo, “Twin Demons”, “Surrounded by Spies”, “Chemtrails”, “Sad White Reggae”, “Try Better Next Time” pertenecientes al disco Never Let Me Go. Para regresar un poco al pasado, sonó “Slave to the Wage” y “Song to Say Goodbye”, canciones que sin duda hicieron un buen trabajo para conectar con sus fans. Uno de los momentos más eufóricos para los asistentes fue cuando se escucharon los riffs de “The Bitter end”, desatando mucha energía, seguida de “Infra-red”.

Tras una pausa, el encore brilló con “Too Many Friends” y “Went Missing”. El setlist estaba por terminar pero sorprendieron con una serie de covers con “Shout” de Tears for Fears, “Fix Yourself” y “Running Up That Hill” de Kate Bush. La noche terminó con una prístina conexión entre Placebo y su público, despidiéndose entre aplausos y esperando volver pronto.

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