Huelga afuera de una maquiladora (Foto: Cuartoscuro)

La llegada del coronavirus a México ha afectado a todos y todas de diferentes maneras. Pero hay quienes son más vulnerables ante la crisis desatada por COVID-19, como aquellos que han tenido que seguir trabajando a pesar de las recomendaciones de quedarse en casa. Algunos son los trabajadores y trabajadoras de la industria maquiladora de exportación en la frontera norte del país, es decir en Ciudad Juarez.

Las ciudades fronterizas son unos de los mayores focos de contagio en el país. Juárez y El Paso son ciudades hermanas donde diariamente cruzan en ambos sentidos aproximadamente 22 mil personas según un reporte de CNN, para estudiar, trabajar, hacer compras, visitar a la familia y hacer negocios.

El flujo se encuentra actualmente restringido es sorprendente que de un lado de la frontera El Paso reporta 802 casos positivos con COVID-19 y 12 defunciones y Juárez tan sólo 234 casos positivos y 52 defunciones según el informe técnico del 26 de abril la Secretaría de Salud del Estado de Chihuahua. Esto quiere decir que la tasa de mortalidad es del 25% mientras que la de El Paso es del 1.69%. ¿A qué se debe la diferencia en esta mortalidad?

En Juárez operan 335 maquilas que dan trabajo alrededor de 300 mil personas de acuerdo con el reporte del Consejo Nacional de la Industria Maquiladora y Manufacturera de Exportación (INDEX).. Siendo un espacio importante para la productividad no sólo en la región sino a nivel nacional. Desde la llegada del COVID-19 las maquiladoras han ido cerrando gradualmente, algunas lo han hecho de forma voluntaria y otras a órdenes expresas del gobierno federal.

Las que siguen abiertas defienden su postura como actividades esenciales, pero en más de una la muerte de trabajadores y contagios ha obligado al cierre al menos temporal de operaciones. En las maquilas que aún operan hay mucha controversia. Algunas maquiladoras pagan bonos al sueldo a sus empleados para que sigan trabajando, pero estos piden que los dejen ir a casa y les paguen su sueldo íntegro. Otras aceptan dejarlos ir, pero pagándoles menos sueldo y existen aquellas que les dan dos opciones: trabajar o firmar una renuncia voluntaria.

Es muy sonado el caso de Lear Corporation, que a pesar de afirmar de haber tomado medidas preventivas tempranas desde los indicios de brotes de COVID-19 en Norteamérica, hoy 13 de sus empleados han muerto y sus 10 plantas se encuentran cerradas.

Una de las maquiladoras también afectadas por la COVID-19 en Juárez es la empresa sueca multinacional Electrolux. Según la información proporcionada a Ibero 90.9 por un empleado de la empresa el cual nos pidió permanecer anónimo por protección de identidad: “A inicios de año hubo cambios en la producción por los suministros que llegan de China. Al llegar la declaración de emergencia por COVID-19 se hicieron ajustes de ingeniería a los proceso de producción y aparte se implementaron medidas de distanciamiento y sanitarias. Sin embargo en la línea de operación es imposible por naturaleza del proceso el distanciamiento ya que se trabaja costado a costado y por ende se pusieron medidas como caretas de plástico, lentes, guantes y cubrebocas”. Estas medidas al parecer fueron insuficientes y tardías ya que se empezaron a presentar contagios, pues no se tomó la medida más eficaz para este caso que hubiera sido quedarse en casa.

Los operadores tuvieron que parar la producción hasta que la gerencia les diera información clara de lo que estaba sucediendo ya que en ese entonces existían rumores de posibles contagios dentro de una de las plantas, los cuales no habían sido confirmados por la empresa hasta ese momento, por “discreción”.

Aún después de que la información ya se dio a conocer de forma abierta el ambiente que imperó fue de tensión y miedo en todos los niveles de la empresa y las diferentes plantas. “Yo no le mencionaba la situación a mi familia para no preocuparlos pero conforme fue avanzando la situación tuve que comenzar a platicarla”, relata nuestro entrevistado.

“Un domingo por la tarde nos avisaron que se suspendían los labores por una semana. Supongo que es por la muerte de una de nuestras compañeras operadoras en la planta de refrigeradores. Pero ayer por la noche nos avisaron que se suspenden otra semana por el fallecimiento de otro operador y más contagiados internados en hospitales”, señala el entrevistado y afirma que la empresa les estará pagando su sueldo al 100% a todos los empleados y que da seguimiento a los casos.

Al preguntar al entrevistado que hacía esencial a Electrolux para seguir operando respondió: “Es esencial para productos de Estados Unidos y no de México. Es duro lo que te estoy diciendo, no es fácil. Se podría escuchar simple pero es una implicación enorme porque es así en la mayor parte de las maquiladoras en Juárez”.

El contexto actual en México esta lleno de matices que debemos observar con detenimiento. Cuando el bienestar económico de algunos, se pone por encima del bienestar de sus trabajadores, ¿En qué momento pasó la vida del ser humano a un segundo plano?