Holy Wave nos lleva de gira con la playlist que hizo para 909
El torpe vuelo de un viaje astral comienza… ¿en carretera? Pues sí, al menos al que nos invita Holy Wave, sí. No solo nos suspendemos en su particular rock psicodélico con toques de shoegaze, sino que somos partícipes de una experiencia totalmente nueva, mágica, casi espiritual.
Hoy, seremos invitados a una de las giras de Holy Wave. Partiremos desde El Paso, Texas, ocuparemos uno de los asientos de su van y, junto con ellos, emprenderemos uno de esos viajes cotidianos por carretera que la banda transita en sus múltiples giras. ¿Cómo lo haremos? Simple. Para vivir la experiencia de viajar con ellos, Kyle Hager, Julián Ruiz, Ryan Fuson, Joey Cook y Dustin Zozaya, nos han preparado una playlist para nuestro perfil de curador en Apple Music.
El road trip dura 3 horas y 58 minutos, son 53 canciones que nos harán ver un sinfín de paisajes a través de las ventanillas de la camioneta. Comenzaremos en El Paso, ya que, como no podía ser de otra forma, se incluyen algunas canciones de los propio Holy Wave; iremos luego por distintas ciudades de Estados Unidos, Suiza, Francia, Libia, Canadá, Reino Unidos y Argentina, donde quizá sea necesario hacer una parada para recordar a SUMO con “Mejor no hablar de ciertas cosas”.
Los paisajes mexicanos también estarán presentes y Lorelle Meets The Obsolete los representará maravillosamente desde La Perla de Occidente con “Líneas en Hojas” y “La Maga”, el norte no se quedará atrás y las chicas de Mint Field nos mostrarán las desérticas vistas de la frontera de Baja California con “Contingencia”, mientras Rigo Tovar, sí, el mismo, nos enseña las costas tamaulipecas con “No que no”.
En la playlist Holy Wave presenta: podrás encontrar también clásicos como Pixies, The Fall, Death in Vegas, R. Stevie Moore, R.E.M., Lee Hazlewood, Love e incluso Abner Jay; pero también novedades y promesas ya cumplidas como Aphex Twin, Choir Boy, Ulrika Spacek, naran ratan, Numb.er, Automatic y Horse Jumper of Love; o sorpresas como Crack Cloud, Protomarty, Charlotte Gainsburg o el propio Rigo que nos demostrarán que estos artistas también transitan por lugares poco sospechados.
