¿Sabes cuál fue el primer edificio moderno en México? No, no fue la casa O' Gorman

¿Sabes cuál fue el primer edificio moderno en México? No, no fue la casa O' Gorman

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La revista internacional de arquitectura Arquine publicó el libro El primer edificio moderno en México, Las casas gemelas de Paul Artaria y Hans Schmidt , escrito por el arquitecto Juan Manuel Heredia. Tuvimos la oportunidad de charlar con él y conocer más acerca de la publicación.

“El libro tiene cierto aspecto polémico, porque el título es muy categórico ¿no? Dice cuál es el primer edificio moderno, un poco para armar una especie de alboroto, porque si en México uno pregunta ¿Cuál es el primer edificio moderno? Existe un consenso, ‘ah es la casa de O’ Gorman en San Ángel’, entonces no es para denigrarlo, es para poner las cosas ciertamente en su lugar. Porque, aunque en su autobiografía O’Gorman dice haber hecho su casa en el 29, las evidencias indican que la casa es dos años posterior”, dice Heredia ante el título de su obra y la introducción del edificio del que habla, que corresponde a dos casas gemelas diseñadas por la dupla Artaria y Schmidt desde Suiza durante los últimos años de vida del despacho (de 1925-1930).

Estas casas fueron construidas para dos familias emparentadas que provenían de contextos acomodados en Suiza, pero que migraron a México, no como refugiados o exiliados, sino para probar suerte. Las casas fueron construidas con los planos y diseños de los arquitectos, sin que ellos hubiesen viajado al territorio mexicano. Estaban ubicadas en un terreno que contempla el Ajusco, cerca del Club Suizo en la Colonia del Valle. Hoy en día, el edificio ya no está, pero el libro de Heredia logra reconstruir su espacialidad e importancia en el contexto de la arquitectura moderna en el país.

Casas Gemelas por Artaria y Schmidt

Casas Gemelas por Artaria y Schmidt

Normalmente la fuente primaria de las que echamos mano para investigar es el edificio mismo, pero en este caso, el edificio mismo ya no existe, entonces la segunda vendría a ser los archivos de los arquitectos que la planearon o cualquier archivo de la época en la que haya documentación sobre el edificio. Y hay un archivo en el Politécnico de Zúrich en Suiza, en donde encontramos básicamente la información más completa que pudimos de las casas. Encontramos el archivo del arquitecto Hans Schmidt, que es uno de los arquitectos de las casas y el Politécnico de Zúrich, tiene muy bien conservado su archivo. De la casa no hay tanta documentación, pero hay lo suficiente como para empezar a investigar. Por otro lado, también me contacté con las familias de una forma un poco indirecta y pude conseguir una entrevista con los nietos de los dueños originales. Entonces esas fueron mis 3 fuentes principales: la primera que no ya está, pero el sitio existe; la segunda, los archivos; y la tercera, la entrevista con la familia y las fotografías que nos proporcionaron”, cuenta.

A veces se argumenta que la arquitectura puede cambiar la actitud de las personas, que puede cambiar la sociedad, Heredia argumenta que esto no se da de manera directa, que en realidad no es tan potente: “Esto me parece muy interesante, porque para hablar de arquitectura moderna, uno casi siempre se refiere a la vanguardia de los años 20 y 30, tanto en Europa como en México —aunque en México fue un poquito más tarde, al principio de los 30— entonces siempre ha existido en esta arquitectura un anhelo utópico de transformación de la sociedad y cierto cambio social que ocurrió gracias a la arquitectura, pero no es un cambio total o radical”.

El arquitecto menciona que una forma para acercarse a la arquitectura moderna es partir de lo que Robert Smithson estipula sobre esta: “Smithson dice: una cosa es que un edificio muestre sus avances tecnológicos de una forma muy directa a los transeúntes —que sea tecnología de punta y que sea mucho show— y que también elimine la decoración de las superficies; pero otra cosa es que esa misma arquitectura que es expresiva y técnica, estéticamente también sea un receptáculo idóneo para el habitar humano. Esa es la verdadera arquitectura moderna, que tiene esos atributos integrados, yo diría”. 

Sobre la comparación con las casas de O’Gorman, el arquitecto argumenta que aunque sean importantes y pioneras, al exponer todo de manera tan explícita, lo que se quería hacer era exponer una ideología “(O’Gorman) exponía las tuberías, las instalaciones eléctricas, exponía de una forma muy clara que la escalera se sostenía por ella misma, sin otro soporte más que el simple hecho del concreto, no le ponía barandal a las escaleras, ni siquiera al estudio, entonces, es como una arquitectura muy de manifiesto; lo que quería afirmar era “esta arquitectura es moderna”.  Mientras que en las casas gemelas de Arias y Schmidt la cosa era distinta, “Estas otras casas, son un poco más serenas, tienen este aspecto moderno de no decir mucho desde el punto de vista de la ornamentación y decoración, pero están pensadas para que ocurra una vida concreta en ellas. No es tanto un símbolo”.

Casa O’ Gorman

Casa O’ Gorman

El libro de Heredia está redactado de manera orgánica para poder seguir la historia del edificio, el contexto, las familias, los arquitectos, el grupo al que pertenecían, lo que los historiadores han dicho sobre estas casas y la vida en ellas. Por otro lado, es interesante mencionar que los ejemplares son, de un lado, el libro en español y del otro, el libro en inglés, unidos poéticamente por una serie de imágenes centrales que hacen referencia a las casas gemelas, pues estas se unían a la mitad por medio de una terraza para contemplar el Ajusco. 

El primer edificio moderno en México es un texto que va dirigido principalmente a arquitectos y estudiantes de esta disciplina, pues como argumenta el autor “la arquitectura es lo que hacemos los arquitectos, en sí hay muchas definiciones, hay una muy famosa que es la de construir espacios habitables para el hombre, esa se usaba mucho en los años 50 y 60 en México ¿no?, pero a mí me gusta retomar de la historia la figura antigua de los arquitektons quienes básicamente eran los directores de las obras”.

Si te interesa el tema, no dudes en adquirir el libro, el libro tiene un costo de 300 MXN y se puede pedir desde la página de Arquine aquí.

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