Un carnaval de ritmos, voces y energía. Un carnaval llamado Hiatus Kaiyote
Fotos: Sofía Arellano
En muchos proyectos musicales hay instrumentos que sobresalen por encima de otros, debido a la calidad y capacidad de su intérprete. El 18 de febrero, a las 8:45 de la noche, en el escenario Sonorama de Bahidorá, testimoniámos una descarga de energía cortesía de Hiatus Kaiyote, una banda en la que el instrumento que sobresale y guía al resto del colectivo es la voz, y su fiel ejército son las voces de tres cantantes más que a su vez se ven envueltos por los finos, alegres y cálidos sonidos de los instrumentos de sus músicos.
Nai Palm es la lideresa creativa que con las melodías que emanan de su voz va guiando al resto del cuarteto, y ni se diga al público, por un carnaval de alegría y energía positiva en cada canción. Hiatus Kaiyote dejó poco tiempo para respirar, pues cada canción resultó una invitación al baile y el movimiento.
Tuvimos la oportunidad de escuchar canciones de antaño como “Molasses” y “Nakamarra”, pero también cortes de su más reciente disco Mood Variant como “Red Room”, canción con la que todo el escenario se tiñó de rojo para darle paso a los tintes de suave bossa nova.
Uno de los momentos más divertidos de la noche llegó cuando Nai reveló que era el cumpleaños de su compañero Simon y subieron una piñata de Gokú, personaje del universo de la caricatura Dragon Ball. Al ritmo de música acelerada y con ganas de compartir todos los dulces que estaban dentro de la misma, la piñata fue destrozada y los cientos de dulces aventados al público que estalló de alegría.
Fue memorable la primera visita de esta banda australiana a México. Cumplieron con las expectativas de quienes llevábamos años preguntándonos cuándo se atreverían a traer a Hiatus Kaiyote. ¡Por fin pasó! ¡Fue mágico! ¡Ojalá pronto regresen!
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Por @AlanZNavarro