La inspiración divina del Aczino
Mauricio Hernández, el endemoniado freestylero parido en América Latina, para muchos el mejor improvisador de habla hispana, quien de hecho tuvo su acercamiento a la cultura por el skate, celebró con sus fans más devotos y sus amigos más allegados su último triunfo con un concierto en corto en el número 30 de General Prim, donde exhibió con maestría verbal de su disco Inspiración divina (2017) y destellos de lo que será su nueva entrega musical.
El jueves pasado desde las 20:00 horas, un tumulto de gente reducido, pero considerable, se dio lugar para disfrutar No lo intente en casa, la presentación del rapero patrocinada por Red Bull. La colonia Juárez, a un lado de Bucareli y en frente de la Secretaría de Gobernación celebró el hip hop con una de las voces que le ha traído mucho orgullo en la rubra del freestyle a México.
El recinto antiguo, pero remodelado, aún conserva ese toque viejo por todos lados. Pequeño, ya que permitió un aforo no mayor a 200 personas intervenido por Red Bull con luces azules y rojas por todos lados, una tarima alargada y un equipo de grabación con dolly. Aczino tiró rima tras rima acompañado de un grupo de instrumentos metálicos de aire (trompetas y saxo), también con una guitarra eléctrica y un corista.
Sonaron canciones como “Inspiración divina” y “Ya no puede volar”, esta última que expresa un sentimiento desgarrador por la situación del país. “Sólo se llegará más rápido, acompañado más lejos” por tanto, sus amigos rappers le tiraron esquina uniéndose al show mientras él hacía su cambio de vestuario. Personajes de las batallas como Jony Beltran y Proof deliberaron unas barras, así como otras leyendas del género en nuestro país lo respaldaron: Serko Fu aventó unas líneas y Dj Aztek de la Vieja Guardia le pasó los platos durante todo el show.
En rueda de prensa, Mauricio Hernández habló sobre la situación del país, tiene fe y empatiza con el nuevo presidente, cree que es bueno que el rap no sea censurado, sin embargo considera que el género ya está absorbido por las masas, “Yo lo hago porque me apasiona” y eso es lo que alimenta su sentido, para él y su manifestación, todo debe de tener un equilibrio para ser único, pugnando por llevar contenido maduro y positivo con una línea marcada.
Es inevitable notar el amor que Mau siente por el rap, confiesa en la rueda de prensa que tenía fiebre, pero que todo se le olvida estando arriba de la tarima.
El intérprete pulió el arte de la improvisación Aczino.